27 diciembre 2007

Ya hay dos cosas que están "malditas"

Si, hasta ahora, un acto tan noble como ir a renovar el carnet de identidad (o en su defecto el de conducir) llevaba aparejado la extraña maldicion de terminar en unas deplorables condiciones tanto fisicas como mentales, todo esto producido por la extremadamente espectacular ingesta de determinadas bebidas espirituosas que no hacian otra cosa que desvirtuar nuestras cualidades mentales.
Desde ayer, ir a los MINICARS se ha convertido en un segundo acto que solemos llevar a cabo con cierta frecuencia, pero que extrañamente, desde ayer, se ha convertido en algo casi tan peligroso o mas que la renovacion de carnets. No recuerdo yo 10 horas consecutivas en el Campo de Operaciones Base rodeados de extraños elixires que hicieron que esta mañana, el levantarse, haya sido una autentica odisea, y que nos hicieron hacer cosas tan raras como ir a llevarle al padre de Zuir una bandeja de pasteles por su cumpleaños. No, yo tampoco entiendo que nos pasó, pero os aseguro que seguiremos investigando el porque de estos extraños fenomenos.
Sin mas se despide de vosotros.............. NAKO, de aquella manera

 

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